Hace unas pocas semanas mi hija me insistió en hacer una maratón, viendo toda la saga de las películas de "Annabelle" y nos las chupamos todas, ella y yo solos, en un fin de semana mmmm digo solos ya que mi mujer es de las que les da muy mal rollo esas películas (aun gracias que soporta a mi muñeco de ventriloquía: El Sr. Sebastián, Sebas para los amigos, el mismo que os presenté unos pocos post más atrás jejejeje) aunque a decir verdad mi hija se pasó gran parte de las películas tapándose los ojos y con algún sobresalto, sin mencionar los gritos jajajaja.
Pero la valiente, aun así insistió en verlas todas mmmm por cierto, si se os ocurre la misma idea que a mi hija de hacer una maratón de esa saga... Mi consejo es que os descarguéis una lista de internet para ver en qué orden visualizarlas, ya que de lo contrario os vais a liar... Hacedme caso, descargaros esa lista, es lo mejor.
Una vez terminamos de ver toda la saga, le dije a mi hija ¿sabías que...? esa muñeca existe realmente, pero nada tiene que ver con la que sale en las películas ya que es muy diferente, con una apariencia más inocente, infantil y agradable, y seguidamente le conté más o menos lo que a continuación leeréis en este post del... ¡Especial de la Semana de CastaWeen!
Raggedy Ann es una muñeca de trapo, con hilos rojos como cabello y una nariz triangular, esta muñeca fue creada por el escritor estadounidense Johnny Gruelle (1880 - 1938) para una serie de famosos libros que escribió e ilustró para niños.
Gruelle la patento el día 2 de septiembre de 1915. El personaje fue concebido ese año, pero fue presentado al público en el libro Raggedy Ann Stories (Historias de Raggedy Ann) de 1918.
La muñeca fue comercializada junto al libro, el concepto se convirtió en todo un éxito. En la secuela del libro, Raggedy Andy Stories de 1920, se incorporó el hermano de la muñeca, llamado Raggedy Andy, quien vestía un traje de marinero.
Gruelle creó a Raggedy Ann para su hija, Marcella, cuando ella le trajo una vieja muñeca de trapo hecha a mano y él le dibujó una cara en ella.
Gruelle se acercó a su estantería y sacó un libro de poemas de James Whitcomb Riley y combinó los nombres de dos poemas, "El hombre Raggedy" y "Pequeña Orphant Annie" y le dijo a su hija: ¿Podríamos llamarla Raggedy Ann? (Raggedy Ann en español sería algo así como Ana Andrajosa).
Marcella murió a los 13 años poco después de ser vacunada en la escuela, sin el consentimiento de sus padres, las autoridades culparon a un defecto cardíaco, pero sus padres culparon a la vacunación... Gruelle se convirtió en un oponente de la vacunación y la muñeca Raggedy Ann fue utilizada como símbolo de la lucha por el movimiento anti - vacunas.
La película de cine del 2013 "Expediente Warren: The Conjuring - El Conjuro" empieza con la historia basada en hechos reales. En 1970, una madre compró una vieja muñeca de trapo Raggedy Ann, en una Hobby Store (Tienda especializada en muñecas y juguetes de colección). La muñeca era un regalo para su hija, Donna, por el día de su cumpleaños.
Transcurridos unos días, se dieron cuenta que ocurrían cosas extrañas, paranormales y todas ellas apuntaban hacia la muñeca, los compañeros de piso de Donna tuvieron tal temor a la muñeca por una serie de acontecimientos y desgracias ocurridas, que decidieron contactar con unos investigadores de lo paranormal, unos demonólogos de renombre "Ed y Lorraine Warren" porque creían que la muñeca, propiedad de Donna, había sido poseída por el espíritu de una niña muerta llamada "Annabelle Higgins".
La muñeca utilizada para esa saga de películas fue diseñada especialmente para las mismas y tiene una apariencia muy incómoda y malvada, la verdadera muñeca llamada Annabelle, no era de porcelana ni tenía el aspecto de una niña pequeña como la que aparece en la película de "Expediente Warren: The Conjuring" ni en "Annabelle". La autentica muñeca era de trapo, como mencioné anteriormente y formaba parte de las miles de Raggedy Ann Doll que se vendieron en Estados Unidos.
Sin embargo, la historia que esconde la verdadera muñeca, es también de las que ponen los pelos de punta (ya sabéis que siempre se suele decir que las apariencias engañan o que la realidad supera la ficción).
El caso de Annabelle fue investigado por nada más y nada menos que por la famosa pareja demonólogos e investigadores paranormales "Ed y Lorraine Warren" (los que mencioné de la película). Para los que no recuerdan o no saben quiénes son, son los mismos que investigaron, por ejemplo, el caso en Amityville, una de las mayores tragedias y de las más macabras de EE.UU. Y que más tarde se convirtió en una película de culto.
De acuerdo con los Warren, la propia muñeca no estaba poseída en realidad, sino que era manipulada por una presencia no humana... Los espíritus no poseen objetos inanimados, como casas o juguetes, ellos poseen a las personas, un espíritu no humano puede vincularse a un lugar u objeto, y esto es lo que sucedió en el caso de Annabelle, esta muñeca era manipulada por un espíritu, un espíritu no humano y demoníaco por naturaleza que creaba la ilusión de estar vivo, con el fin de obtener reconocimiento y llamar la atención... De hecho, el espíritu no tenía la intención de estar ligado a la muñeca, mas bien estaba tratando de poseer un huésped humano y el juguete era su herramienta manipulándola con el fin de obtener acceso al propietario de la muñeca.
La verdadera muñeca Annabelle todavía puede contemplarse hoy en día en el Museo de lo Oculto de Ed y Lorraine Warren, en Monroe (Conneticut, EE.UU.). Aunque las visitas están restringidas, es posible tener acceso al lugar a través de diferentes eventos que el museo organiza periódicamente. La muñeca permanece encerrada en una vitrina de madera, sellada con un cristal. Un cartel advierte a los visitantes del supuesto peligro que encierra este aparentemente simpático juguete, ya que sucedieron algunas desgracias a visitantes que retaron y se mofaron de la muñeca. Por si acaso, un sacerdote acude al lugar dos veces al mes para echar agua bendita sobre Annabelle y otros objetos malditos que residen en dicho Museo Ocultista de los Warren.
Si queréis saber más sobre el caso de la muñeca Annabelle y de las desgracias que la envuelven, tenéis mucha más información en internet, yo ya no he querido extenderme más.
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