COPIAR O CORTAR Este primer código evita que copien los textos de tu página o blog Este segundo código evita que copien las imágenes y gif COPIAR O CORTAR YO TAMBIÉN LO TUVE! NOSTALGIA Y RECUERDOS DE LOS AÑOS 60 - 70 - 80 - 90's: agosto 2023

lunes, 21 de agosto de 2023

LLEGARON MIS VACACIONES!!!

Una entrada rápida para anunciar que el blog estará unos días inactivo, voy a tomarme unas pequeñas vacaciones, unos días de relax me va a venir genial para recargar pilas, que el año es muy largo... Hasta la vuelta. Nos vemos muy prontito.

sábado, 19 de agosto de 2023

♫♪♫♫♪ ...ME GUSTA LA CHOCHONA, YO QUIERO UNA CHOCHONA... ♪♫♪♫♪

Una Chochona para Montse.

Permitidme que os cuente una bonita historia, una historia basada en hechos reales, muy, muy reales, aunque yo me haya tomado la libertad de añadirle unos poquitos toques de humor de esos que me caracterizan jejejejeje. También podría añadir que esta es una historia un poco triste, pero que después de 37 años tendrá un final feliz para nuestra protagonista y buena amiga, para Montse, a la que va dedicado este post.

Montse iba contenta y feliz cogida de la mano de sus padres, montaría en el tiovivo sobre algún caballo y en el coche de bomberos tocando incesantemente la campanita y el botón de la sirena, comería algodón de azúcar o puede que una manzana de caramelo, difícil elección mmmm mejor comerse uno de cada, ¿no?

A medida que iban acercándose a la feria se escuchaban las sirenas y esas rumbas tan flamencas que los Chichos componían y que tanto sonaban en los autos de choque (hasta que llegó la tecno rumba de Camela jajajaja), pero por encima de este batiburrillo se escuchaba repetidamente un cantarín estribillo que llevaron tatuado a fuego todos los niños que pisaron las ferias de mediados de los 80's.

Estuvieras en la atracción que estuvieras, de fondo siempre se escuchaba aquel estribillo a grito pelado... "Le ha tocado la muñeca Chochona... ¡Una muñeca Chochona para el caballero! ¡Una muñeca Chochona para la señora! Y otra y otra y otra muñeca Chochona."

Montse se preguntaba qué era eso de la Chochona. Eso parecía una palabrota fea, ¿no? ¿Pero de dónde salía ese repetitivo eslogan tan pegadizo...?

La duda se disipó al pasar por la tómbola, allí estaba aquel señor tan escandaloso y dicharachero que gritaba "¡Y OTRA Y OTRA Y OTRA MUÑECA CHOCHONA!" con aquella potente voz, fijo que hubiera podido hacer un dueto al más puro estilo Freddie Mercury & Montserrat Caballé jejejeje, pero volvamos a nuestra amiga Montserrat, no a la diva, sino a nuestra pequeña Montse, a quien va dedicado este post.

Cuando Montse pasó por la tómbola, se quedó boquiabierta, aquel tenderete de feria estaba lleno, repleto de coloridas muñecas con cuerpo de trapo, cabeza de plástico y pelo de lana con aspecto de fregona... Aquello fue amor a primera vista, Montse se olvidó de las atracciones, Montse solamente tenía una cosa en mente, Montse quería una muñeca Chochona.

"Mamá, papá. ¡Yo quiero una Chochona, me gusta la Chochona, yo quiero una Chochona...!". Y para contentar a la pequeña Montse, sus padres, Antonia y Daniel, decidieron probar suerte, parecía algo sencillo, aquellas muñecas tocaban muy a menudo, casi todos los niños y niñas de la feria llevaban e iban abrazados a una de esas muñecas Chochonas.

"Por favor, por favor deme un par de boletos" le pidió Antonia, la madre de Montse, al feriante de la tómbola y este acercándole unos sobres le dijo "coja usted misma señora y que la suerte le acompañe" solo faltaba que sonara la banda sonora de Star Wars jejejejeje, pero nada, nada de Chochona, nada de premio. Esta vez fue Daniel, padre de Montse, el que le dijo al feriante "caballero, deme usted un par de sobres más, pero que sean de esos que tocan" le dijo mientras le guiñaba el ojo al más puro estilo de Don Vito Corleone, pero nada, ni por esas.

Fueron muchos los sobres que los padres de Montse compraron en aquella tómbola mientras veían a otros niños y niñas que conseguían el preciado premio y ellos a pesar de todo el dinero que gastaron comprando boletos, nada, nada, el premio nos les salía hasta que al final la madre de Montse tuvo la brillante idea de ofrecerle dinero al feriante de la tómbola y comprársela.

"Oiga, dígame cuánto vale la muñeca y directamente se la compramos" la respuesta del feriante fue rotunda, "no, lo siento señora, pero las muñecas no están en venta, lo tenemos completamente prohibido, si ustedes quieren una muñeca tendrá que ser la suerte de la tómbola la que lo decida". Supongo que al feriante le salía más a cuenta que le compraran los sobres con el boleto en su interior y no que le compraran directamente la Chochona.

Todo hubiera sido diferente si la muñeca se hubiera vendido en tiendas, pero esta peculiar muñeca nunca se comercializó en una juguetería, solo se fabricó íntegramente como premio para las tómbolas de la feria y para hacerse con una había que acudir a la tómbola sí o sí y tener un poquito de suerte, algo que parecía no tener aquel día los padres de Montse.

Daniel para consolar a su pequeña le dijo "vamos a la caseta de tiro, seguro que allí te consigo regalitos, yo tengo muy buena puntería, donde pongo el ojo, pongo el perdigón". Pero como ya sabemos en estas casetas, aparte de cigarrillos o puros pinchados en un palillo, llaveros y poca cosa más se podía encontrar en aquellas casetas y claro, no se le iba a dar un cigarrillo Winston o John Player Special a la pequeña Montse mmmm aún, aun si hubieran sido de chocolate... También estaba lo de dispararle a las bolas de colores tipo futbolín que estaban aposentadas en los estantes verticales, pero Montse ya estaba saciada de azúcar con aquel pedazo de pegajoso algodón y la manzana con el baño de rico caramelo... Nooooo más azúcar.

Montse aquel día de mediados de los 80's se llevó un gran disgusto, no tuvo la suerte, la dicha, la fortuna de tener en su infancia una muñeca Chochona. Aquello fue una espinita que lleva clavada desde entonces, 37 años han pasado ya.

Ya en la actualidad, un buen día, en una comida entre buenos amigos, hablábamos de nuestro blog, de lo especial, mágico y nostálgico que es "EL BAÚL DE HAL" y Montse me hizo una pregunta "tú que estás metido en este mundillo de lo vintage y que es tu hooby mmmm ¿tú podrías conseguirme una auténtica muñeca Chochona?". Le respondí que posiblemente sí, pero conseguirla en un estado impecable, eso ya sería otro cantar y allí quedo todo o eso pensé yo.

Hace cuatro o cinco meses llegó a casa mi esposa Judith después de su sesión semanal en la que junto a Montse se pega un buen pateo de 8 o 10 Km andando a paso ligero y uno de los temas de conversación surgidos en aquella alocada marcha jejejejeje fue la historia de Montse y la espinita que llevaba clavada por no haber conseguido aquella muñeca Chochona cuando era niña mmmm eso me dio una idea, lo hablé con Judith y a los dos nos pareció genial, le conseguiríamos quitar esa espina.

Pregunté a algunos contactos, nos movimos por mercadillos de antigüedades, consulté páginas de compra y venta especializadas en este tema vintage y la verdad, desde el primer momento encontré Chochonas, algunas auténticas y otras que las querían hacer pasar por las mismas teniendo muy poco que ver con la mencionada muñeca, conseguir una de estas muñecas en estado aceptable no es difícil, pero conseguirla impecable cuesta más y más paciencia tienes que tener, pero como soy tan cabezota y no me rindo fácilmente, al final di con ella, nada más verla algo dentro de mí dijo "esta es".

Mañana se celebra el 50 cumpleaños de Montse, aunque en realidad es el día 24. Es una fiesta sorpresa que David, su marido y gran amigo mío, ha preparado con mucho cariño, una fiesta que Montse no se espera y tanto Judith como yo pensamos que es un momento inmejorable, ya es hora de que Montse tenga su muñeca Chochona, mañana Montse recibirá un sobre de tómbola con premio seguro. Lo que la suerte le negó aquel día de mediados de los 80's nosotros, Judith y yo nos encargaremos de que se cambien las tornas y que su boleto esta vez sea el premiado, con un premio que ella no se espera ni se imagina jejejeje.

Por adelantado te deseamos un feliz cumpleaños querida Montse.









En aquellos coloridos 80's se repartieron un sin fin de muñecas Chochonas. En miles de hogares españoles, quizá olvidada en algún rincón o, por el contrario, guardada como un tesoro, aún se encuentran algunas de estas muñecas gracias a todas las que repartieron las tómbolas de la época, lo curioso que nadie las compró en aquel tiempo, eso era un imposible, como ya dije esta fue una muñeca que nunca se comercializó en una tienda, solo se fabricó para repartir como premio en las ferias.

Hoy las Chochonas son un clásico de los más célebres, sin duda, como también aquel perrito piloto, que repartieron las tómbolas y que seguro también recordaréis. "¡QUÉ ALEGRÍA, QUÉ ALBOROTO, OTRO PERRITO PILOTO!", eslóganes cantados a viva voz en las ferias y tómbolas de antaño, con tanta, tanta intensidad y tanta fortuna que la expresión quedó guardada en el acervo popular de nuestra memoria.

Quiero recordar y también mostrar mi agradecimiento y respeto a Manuel Fernández, ya que esta peculiar muñeca que empezó a figurar en las tómbolas de feria y acabó causando furor en toda España fue gracias a Manuel Fernández, alias "Manolo el Loco", propietario de la popular tómbola del Cubo. A Manolo se le ocurrió bautizar a la muñeca como Chochona y acuñó el eslogan que todos conocemos y recordamos "Y OTRA Y OTRA Y OTRA MUÑECA CHOCHONA" y que acabó haciéndose omnipresente en todas las tómbolas de la época.

El bueno de Manolo pasó a mejor vida en 2010, pero su legado que es de agradecer perdura en la memoria de miles de adultos que vuelven a ser niños cuando rememoran con una sonrisa aquellas tardes de feria que tanta diversión nos proporcionaron.

Anímate, deja volar tu imaginación, cierra los ojos y coge un sobre, pide un deseo, si lo deseas con mucha fuerza, seguro que te saldrá un boleto premiado y se cumplirá lo que pediste. ¡SUERTE!

sábado, 12 de agosto de 2023

EL SOFÁ DE ESKAY

Ahora no me atrevería a sentarme en verano en uno de estos sofás y menos sin camiseta... El contacto con este material hacía que sudaras como un gorrino jajajaja y que, acto seguido, uno se quedara pegado a él como si hubiese sido untado con barra de pegamento uffffff qué martirio.

sábado, 5 de agosto de 2023

LOS CARRITOS DE COJINETES O RODAMIENTOS

No eran de alta tecnología, no eran bonitos, no eran silenciosos, no eran fiables, pero el carro de cojinetes o rodamientos fue sin duda uno de los juguetes de fabricación casera más popular de muchas décadas del pasado, carritos que nos fabricábamos nosotros mismos y después los enseñábamos, nos montábamos y los conducíamos llenos de orgullo hasta llegar a una bajada donde nos lanzábamos, ahí era donde se ponía a prueba una buena fabricación, en el momento en el que estabas bajando a toda pastilla cuesta abajo es cuando descubrías los errores que habías cometido en su construcción, como consecuencia algunas peladuras en rodillas, manos o codos y puede que algún moratón o chichón, pero no nos rendíamos y subsanábamos aquellos errores de fabricación para estar listos en futuras carreras.

Hoy día estos carros siguen existiendo como parte de fiestas y exhibiciones. Según mi información, este tipo de carritos se fabrican desde por lo menos los años 40's hasta bien entrados los 80's del pasado siglo, que es cuando yo los conocí y que también alguno me fabriqué. Era raro el niño o niños que no se construían alguno de estos. El carro de cojinetes se convertía en uno de los entretenimientos que más gustaba de la chiquillería de la época.

La diversión comenzaba por ir a pedir los materiales a las carpinterías y talleres mecánicos, una vez teníamos todo el material comenzaba la construcción, la inventiva y la imaginación de cada pequeño manitas que colaboraba salía a relucir y aquellos trozos de madera y clavos que nos daban en las carpinterías o los rodamientos y cojinetes que desechaban los talleres mecánicos y que acababan en nuestras manos, se convertían en meteóricos y veloces sonoros carritos.

Hay quien los sigue construyendo para exhibiciones o para competir con ellos en fiestas populares y batir récord de velocidades. Sin ir más lejos mmmm podría poner como ejemplo la fiesta mayor de la localidad donde resido, una de las tradiciones de estos próximos días festivos de mediados de agosto es la bajada de andróminas, los niños y no tan niños se lanzan calle abajo con sus carritos de fabricación propia, ya los hay de todo tipo, diferentes materiales, más ligeros, con ruedas más veloces, tuneados, pero también se pueden ver algunos de aquellos clásicos carritos fabricados con tablas y con tres o cuatro cojinetes, carritos que días antes de la competición, se construyen o simplemente les hacen una buena puesta a punto a los que ya guardan de años anteriores.

También están los carritos con un aire más moderno y que no dejan de tener ese estilo retro, esos que sin duda alguna no pierden la esencia de los viejos carritos, como el azul que os enseño en las primeras fotos (mmmm aunque estoy montado en uno de ellos, no me atrevería a competir en una de esas carreras, no estoy tan loco, solo es una foto de postureo jajajajaja) este carrito tan vacilón de rodamientos que os enseño es de mis sobrinos, Ferran, Ricard y Tomás. Es un pedazo de bólido que me recuerda mucho a aquellos "Pony Kart" que tanto nos gustaban a los críos de los 70's y 80's.

Este bólido de mis sobrinos, aun teniendo ese aire retro-moderno y aunque parezca que en cualquier momento sus motores empezaran a rugir más que el león de la Metro Goldwyn Mayer, guarda toda la esencia que os mencioné anteriormente y no deja de ser un carrito de cojinetes con algunos cambios más aerodinámicos y modernistas, pero el estridente y ensordecedor ruido del acero de los cojinetes rodando por el asfalto y echando chispas, es el mismo, eso no ha cambiado nada, os lo aseguro.

Algunas de las imágenes fueron recopiladas y extraídas de internet. Los créditos a quien correspondan. Gracias.