No eran de alta tecnología, no eran bonitos, no eran silenciosos, no eran fiables, pero el carro de cojinetes o rodamientos fue sin duda uno de los juguetes de fabricación casera más popular de muchas décadas del pasado, carritos que nos fabricábamos nosotros mismos y después los enseñábamos, nos montábamos y los conducíamos llenos de orgullo hasta llegar a una bajada donde nos lanzábamos, ahí era donde se ponía a prueba una buena fabricación, en el momento en el que estabas bajando a toda pastilla cuesta abajo es cuando descubrías los errores que habías cometido en su construcción, como consecuencia algunas peladuras en rodillas, manos o codos y puede que algún moratón o chichón, pero no nos rendíamos y subsanábamos aquellos errores de fabricación para estar listos en futuras carreras.
Hoy
día estos carros siguen existiendo como parte de fiestas y exhibiciones. Según
mi información, este tipo de carritos se fabrican desde por lo menos los años
40's hasta bien entrados los 80's del pasado siglo, que es cuando yo los conocí
y que también alguno me fabriqué. Era raro el niño o niños que no se construían
alguno de estos. El carro de cojinetes se convertía en uno de los
entretenimientos que más gustaba de la chiquillería de la época.
La
diversión comenzaba por ir a pedir los materiales a las carpinterías y talleres
mecánicos, una vez teníamos todo el material comenzaba la construcción, la
inventiva y la imaginación de cada pequeño manitas que colaboraba salía a
relucir y aquellos trozos de madera y clavos que nos daban en las carpinterías
o los rodamientos y cojinetes que desechaban los talleres mecánicos y que
acababan en nuestras manos, se convertían en meteóricos y veloces sonoros
carritos.
Hay
quien los sigue construyendo para exhibiciones o para competir con ellos en
fiestas populares y batir récord de velocidades. Sin ir más lejos mmmm podría
poner como ejemplo la fiesta mayor de la localidad donde resido, una de las
tradiciones de estos próximos días festivos de mediados de agosto es la bajada
de andróminas, los niños y no tan niños se lanzan calle abajo con sus carritos
de fabricación propia, ya los hay de todo tipo, diferentes materiales, más
ligeros, con ruedas más veloces, tuneados, pero también se pueden ver algunos
de aquellos clásicos carritos fabricados con tablas y con tres o cuatro
cojinetes, carritos que días antes de la competición, se construyen o
simplemente les hacen una buena puesta a punto a los que ya guardan de años
anteriores.
También
están los carritos con un aire más moderno y que no dejan de tener ese estilo
retro, esos que sin duda alguna no pierden la esencia de los viejos carritos,
como el azul que os enseño en las primeras fotos (mmmm aunque estoy montado en
uno de ellos, no me atrevería a competir en una de esas carreras, no estoy tan
loco, solo es una foto de postureo jajajajaja) este carrito tan vacilón de
rodamientos que os enseño es de mis sobrinos, Ferran, Ricard y Tomás. Es un
pedazo de bólido que me recuerda mucho a aquellos "Pony Kart" que
tanto nos gustaban a los críos de los 70's y 80's.
Este
bólido de mis sobrinos, aun teniendo ese aire retro-moderno y aunque parezca
que en cualquier momento sus motores empezaran a rugir más que el león de la
Metro Goldwyn Mayer, guarda toda la esencia que os mencioné anteriormente y no
deja de ser un carrito de cojinetes con algunos cambios más aerodinámicos y
modernistas, pero el estridente y ensordecedor ruido del acero de los cojinetes
rodando por el asfalto y echando chispas, es el mismo, eso no ha cambiado nada,
os lo aseguro.
Algunas
de las imágenes fueron recopiladas y extraídas de internet. Los créditos a
quien correspondan. Gracias.
Recuerdo una anécdota cuando fuimos a robar cogijetes para hacernos un carrito, el guarda de la caseta nos cogió infraganti.
ResponderEliminarOstras!!! ¿Tú de ladrón de guante blanco de cojinetes...? Menos mal que después te pasaste a los Boy Scouts jejejejeje Abrazos hermano
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