Hoy buscando dentro de mi baúl, encontré unos pequeños huesecillos, o mejor dicho, unas piezas de plástico que imitan a los "astrágalos" huesecillos de las patas traseras procedentes de ovejas, cabras y corderillos… Esos pequeños huesecillos con una forma peculiar de cuatro lados y una especie de hendidura en su parte frontal y trasera, cuyas dimensiones podían ser fácilmente de 3cm x 2cm y cada uno de sus cuatro lados recibe un nombre diferente, que pueden variar según la zona geográfica.
En los años
70's las Tabas se podían comprar en kioscos y jugueterías, pero para su venta
tuvieron que dejar de ser huesos de verdad y se convirtieron en pequeñas piezas
de plástico imitando a los mencionados huesecillos, algunas de ellas como los
setenteros juegos de Tabas que os enseño de mi colección de "EL BAÚL DE
HAL" Tabas de plástico con múltiples y llamativos colores.
Este es uno
de esos juegos que ya tienen algunos añitos, por decir yo diría que mas años
que Matusalén, las evidencias científicas lo datan en el 5.000 antes de Cristo,
que eso ya son años y por aquellos días ya se jugaba con los
"astrágalos" de las cabras. Como dato curioso, parece ser que en los
restos del ajuar de la tumba de "Tutankamón"
se encontraron unos huesos de este tipo junto con un tablero.
Sin embargo,
las evidencias más comunes y habituales proceden de asentamientos arqueológicos
de época griega o romana. Es en esas culturas donde podemos afirmar con total
rotundidad y seguridad que este juego de habilidad estaba totalmente
normalizado en aquella época.
Estos huesos
debieron gozar de gran prestigio, puesto que se han encontrado incluso réplicas
en otros materiales nobles como marfil, cristal, arcilla o incluso metales
preciosos. Debido a su peculiar forma (casi cúbica) fueron usados para el
juego, de hecho, puede que sean el origen de los dados.
Cabe destacar
que cada Taba tenía 4 caras bien diferenciadas y que cada lado de la Taba está
representado con un nombre: hoyo, panza, liso y rey, pero recordad que la forma
de llamar a cada cara de la Taba es distinta y se le puede dar otro nombre
dependiendo de la zona geográfica en la que nos encontremos, esto mismo sucede
con el juego, al igual que dependiendo de la población donde se juegue, también
pueden cambiar las reglas dando lugar a diferentes juegos de Tabas.
En Europa, en
países como Francia y España (precisamente quiénes la popularizaron) este juego
está prácticamente en vías de desaparición, habiéndose conservado como juego
infantil de habilidad o juego de azar entre los adultos, sobretodo en aldeas de
pastores. Algo muy distinto sucede en Mongolia, así como en la Pampa Argentina,
en la actualidad las tabas siguen estando muy vigentes en esos lugares llegando
a realizarse competiciones serias de las mismas.
Aunque hay
muchas modalidades como en cualquier juego tradicional, las Tabas han variado
de modo a lo largo de la historia y cada región tiene sus reglas, la forma más
extendida y común, al menos para mí, ya que fue con la que aprendí a jugar, es
aquella en la que se utilizan cinco tabas blancas y a ser posible una sexta
taba pintada de rojo o de otro color, solo es para diferenciarla de las demás,
o bien en su lugar también se puede jugar con una bolita saltarina.
El juego
consiste en lo siguiente: Cinco de las tabas se arrojan al aire y se las deja
caer al suelo. La sexta taba (la de color) se irá lanzando hacia arriba.
Mientras la taba de color está en el aire, el jugador o la jugadora irá
colocando las que están en el suelo, en la cara del hoyo, la panza, el liso o
el rey (acordaros que estos nombres pueden variar según la zona) así hasta
conseguir pasar por todas las caras de las cinco tabas. Gana el jugador que lo
consiga con menos lanzamientos de la colorida Taba.
Otra versión
del juego es la de que cuando la Taba de color está en el aire, el jugador
trata de coger el resto de Tabas del suelo con la misma mano con la que lanzó
la taba coloreada y seguidamente recoger la taba de color sin que caiga al
suelo.
Se intentara
recoger el máximo número de tabas en cada turno, pero ojo, no se te puede caer
ninguna, porque de lo contrario, pasa el turno y le toca al otro jugador, vence
la persona que consiga recogerlas todas en el menor número de intentos.
Si juegas con
la variante de la bolita saltarina (aunque el juego original no la tenía) se
tiran las cinco tabas al suelo y seguidamente lanzas la bola hacia arriba,
colocas la taba en la posición que toque, dejamos que bote la bolita, una vez
ha botado la recogemos en el aire y así ir colocando las tabas una a una en la
misma posición todas ellas, como ya comenté anteriormente, con el hoyo hacia
arriba, luego la panza, el liso y para finalizar el rey.
O bien en vez
de ordenarlas por caras, también puedes jugar a retirar una a una del tablero
con el mismo sistema de juego mmmm pierde el turno al que se le escape la
pelota y gana el que complete la colocación de todas las tabas o la retirada de
las mismas, depende de la versión de juego que elijas.
Si buscas por Internet seguro que encontraras otras muchas formas interesantes de jugar a las tabas, en este post solo están algunas de las más sencillitas y las que más recuerdo.
Este juego siempre lo he asociado a las niñas, en mis años de crio, eran ellas las que jugaban, en su mayoría. Recuerdo jugar alguna vez, pero pocas la verdad.
ResponderEliminarSupongo que sera como otros tantos juegos, dependiendo la zona...
EliminarEso me recuerda a lo de los cromos de picar mmmm en mi querida Almeria lo jugaban las niñas solamente y siendo niño, al trasladarnos a vivir Barcelona aquello de ver mas a niños que a niñas picando cromos a la hora del patio me choco mucho, muchísimo.