COPIAR O CORTAR Este primer código evita que copien los textos de tu página o blog Este segundo código evita que copien las imágenes y gif COPIAR O CORTAR YO TAMBIÉN LO TUVE! NOSTALGIA Y RECUERDOS DE LOS AÑOS 60 - 70 - 80 - 90's: LOS CROMOS TROQUELADOS DE MAZINGER Z. PANRICO

sábado, 16 de noviembre de 2024

LOS CROMOS TROQUELADOS DE MAZINGER Z. PANRICO

Seguro que recordarás ese momento mágico en el que tu madre te compraba un pastelito de Panrico, y con él, la emoción de encontrar uno de los codiciados cromos troquelados de Mazinger Z. Esa combinación explosiva de chocolate y aventuras japonesas marcó la vida de muchos jóvenes, allá por 1978. Panrico supo captar la esencia de una generación que soñaba con robots gigantes y héroes de otro mundo. Todo esto cabía en un pequeño trozo de cartón troquelado, que venía dentro de un sobrecito blanco de papel, posiblemente manchado de chocolate y adjunto a la parte posterior del pastelito.

La colección de cromos de Mazinger Z se convirtió en un clásico por derecho propio, una mezcla de nostalgia y arte… bueno, quizás llamarlo "arte" sea muy generoso, pero sin duda tenían personalidad. Estos cromos, de los que hubo 85 en total, no eran exactamente fieles al estilo de los personajes originales. Las razones iban desde la dificultad (o el precio) de obtener los derechos hasta, quizá, el hecho de que los artistas en Panrico no eran expertos en animación japonesa. Al final, eso poco importaba: para nosotros, los niños, Mazinger Z era simplemente un pedazo de maravilla en cada sobrecito.

Encontrar una colección completa como esta es una tarea difícil, además de bastante costosa. He llegado a verla a precios que oscilan entre los 1.000 € y los 2.000 €. La que os muestro hoy no es precisamente barata, pero tampoco me costó esas cifras tan desorbitadas. Tuve la suerte de adquirirla hace tiempo gracias a un coleccionista que me ofreció reproducciones de excelente calidad de su colección original. Y hoy, después de mucho tiempo, la saco de mi baúl, de "EL BAÚL DE HAL".

Al principio, Panrico lanzó 20 cromos sin numerar. Era un movimiento práctico (y barato), pero cuando la colección despegó en popularidad, decidieron expandirla y añadir otros 65 cromos, esta vez numerados. Así, aquellos primeros 20, los "sin numerar", se convirtieron en piezas raras. Como si eso no fuera suficiente, Panrico decidió introducir en esta primera tanda algunos personajes de la secuela de Mazinger Z, llamada Goldorak (UFO Robo Grendizer). Claro, a la mayoría de nosotros nos daba igual, pero para los puristas (esos que aparecieron años después), esta confusión fue casi un sacrilegio.

El caso es que, para muchos, abrir el pastelito y descubrir un nuevo personaje, aunque fuera de Goldorak, era motivo de alegría. ¿A quién le importaba si era de una serie u otra? Los niños de aquella época querían más cromos y más aventuras, y con cada nuevo cromo, más horas de juego.

Una de las curiosidades más raras de esta colección es que El Corte Inglés también se subió al carro de Mazinger Z, colaborando con Panrico para distribuir los mismos cromos en sus departamentos de juguetes, pero con su propio logo. Estos cromos, idénticos salvo por ese detalle, son hoy una rareza digna de coleccionistas. Es casi imposible encontrarlos, pero si algún día abres una vieja caja en el trastero y ves un cromo con el logo de El Corte Inglés, considérate afortunado. Quizá tengas en tus manos un pequeño tesoro de los 70's que, como todo lo bueno de esa época, tiene un valor sentimental mucho mayor que el monetario.

La mayoría de nosotros conseguíamos los cromos en los míticos pastelitos Tronkitos. Quizás este nombre no suene tan poético hoy en día, pero para un niño de los 70's, Tronkito era casi sinónimo de felicidad. En cada Tronkito había un cromo, y eso era todo lo que necesitábamos.

Sabíamos que esos pastelitos no eran precisamente un manjar gourmet, pero tenían un sabor que aún recordamos con cariño. Era el sabor de la aventura, de la posibilidad, de esos personajes con los que jugábamos en el recreo o en el suelo del salón.

A veces, cuando nuestros padres no nos compraban uno, recurríamos a estrategias de emergencia, como pedir en la tienda las cajas vacías de Tronkitos. ¿Por qué? Porque en la parte de abajo, ¡sorpresa!, había ilustraciones de los personajes en mayor tamaño. Esos momentos eran lo más cercano a ganar la lotería infantil.

Aquí viene una historia que seguro muchos podrán entender y se sentiran identificados: el destino trágico de los cromos en la "limpieza de mamá". Esos cromos de Mazinger Z, guardados en una caja de zapatos o en un cajón especial, acumulaban polvo y años. Hasta que un día, desaparecían. Preguntabas a tu madre, y ella respondía sin darle importancia: "Ah, eso lo tiré. Era solo un montón de papelitos viejos." Gritabas, como mi buen amigo y colega de hobby Emilio Delliafonte, quien convirtió esa pregunta en el título de su blog Retro - Vintage: "MAMA PER QUÈ HO VAS LLENÇAR?", que se podría traducir como: "MAMÁ, ¿POR QUÉ LO TIRASTE?". Tremendo título para un blog Retro - Vintage, jejejejeje. Aunque Emilio me confesó entre risas que, en su caso, su madre le guardaba todo. ¡Un saludo, querido Emilio, si me lees!

Para los coleccionistas de entonces, esta limpieza no era algo trivial; era una gran tragedia. Hoy en día, recuperar una colección completa de 1978 con sus 85 cromos puede salir muy caro. Es curioso cómo esos trozos de cartón que parecían insignificantes en su momento hoy son piezas de alto valor en el mercado de coleccionistas.

Uno de los aspectos más especiales de esta colección era que muchos cromos estaban troquelados y podían ponerse de pie, convirtiéndose en figuras para jugar. Representaban a los "brutos mecánicos", las criaturas del Doctor Infierno, junto a Afrodita A, Sayaka, Koji y el resto del elenco. El planeador de Mazinger Z, en particular, era uno de los más codiciados porque se usaba para cualquier aventura y acababa completamente gastado.

Hoy, al revisar estos cromos que saco de "EL BAÚL DE HAL", o al recordar aquellos pastelitos Tronkitos, siento una gran nostalgia. Quizá los diseños no eran perfectos ni las ilustraciones precisas, pero tenían alma. En los 70's, no buscábamos cromos perfectos: queríamos héroes, aventuras y un poco de magia.

Si eres de los afortunados que aún conserva un cromo de Mazinger Z, míralo con cariño. No son solo cromos; son trozos de infancia, aventuras y sueños.





1 comentario:

  1. Estos son una joya los originales. Creo recordar que te conté que compre una bolsa llena de estos cromos en un mercadillo a muy buen precio, muy bueno. Los cambie por material madelman, de primara dos figuras completas. incluso un caballo perfecto y accesorios. Con eso te lo digo todo de esto hará más de veinte años.

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