Hace unos días, me llegaba un detallazo de mi muy querido amigo y hermano de coleccionismo Juan Pedro Akela, del Kiosko de akela, el regalazo fue un par de juguetes de esos que para muchos rayan el límite de lo políticamente correcto y que a mí y a muchos otros coleccionistas de este mundillo nos encantan, se trata de un par de arcos de la valenciana casa "FAL", con sus flechas al más puro estilo piel roja, con su cuchillo, su tomahawk y sus penachos de plumas, unos kits muy bien preparados para combatir a cualquier soldado azul que nos imaginemos jejejeje.
Los blísters de los arcos tienen unas fantásticas
ilustraciones de un par de guerreros en pie de guerra y hablando de las
ilustraciones, al final de este post os dejo un enlace de mi kiosko preferido,
donde el bueno de Akela nos cuenta unas curiosidades muy interesantes sobre
estas ilustraciones que os menciono, no os las perdáis.
Los arcos y las flechas han sido utilizados para el deporte
y la supervivencia en casi todas las partes del mundo desde la edad de piedra
tardía.
Los arcos se han usado durante miles de años siendo un arma
importante en la caza, el deporte, como arma de guerra o bien como juguete (ese
es nuestro caso), el arco ha contribuido decisivamente en diversas culturas
hasta que con el descubrimiento y uso generalizado de la pólvora en las armas
de fuego se fue casi olvidando y de esta manera lo llevaron a su sustitución,
principalmente en las guerras, aquella arma tan letal y temida durante varios
siglos en gran parte del mundo, se quedó en un segundo, tercer, cuarto o vaya
usted a saber en qué puesto, pero lo que si quedo claro, es que ya estaba muy
lejos de ser lo que fue.
Siendo niño, en el pueblo me gustaba fabricar mis propios
arcos y con finas cañas que hacían la función de flechas, competíamos a ver
cuáles eran los mejores arcos entre los chavales del barrio.
Recuerdo un día que se presentó una visita en casa
preguntando por mi padre, cuando mi progenitor salió a la puerta se puso muy
contento y lo recibió con un fuerte abrazo, después me entere de que era su
primo Luis de Viladecans (Barcelona) hasta ahí podría parecer normal si no
fuera porque el primo de mi padre era tuerto mmmm le faltaba un ojo y encima se
parecía a Popeye o así lo recuerdo yo jejejejeje...
Desde aquel día que le pregunte a mi padre que le ocurrió en
el ojo a su primo, miro con mucho más respeto y precaución este tipo de
juguetes y nunca más volví a jugar a ver quien lanza la flecha más alto mmmm
recuerda que todo lo que sube, baja... Algo que desgraciadamente el primo Luis
de Viladecans aprendió de niño jugando y compitiendo con sus amigos, con arcos y
flechas en mano, arcos muy similares a los que nos fabricábamos nosotros mismos.
BLÍSTER INDIO DE FAL, S.A. Y LA HISTORIA DE DOS ILUSTRACIONES
Me alegra que te gusten, son una pasada yo tengo otro que fueron todos un regalo de un buen amigo, este tipo de coleccionismo tiene eso, que nos regalamos unos a otros. Tu entrada genial y se complementan muy bien las dos entradas la de tu blog y la del mia. Abrazo.
ResponderEliminarGracias hermano, por el detallazo y por el comentario... La verdad que tienes mucha razón las entradas se complementan perfectamente y los arcos son fantásticos. Abrazotes!!!
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